El Enfermero y la Oncología Pediátrica

Sin dudas, una de las especialidades más conflictivas en las ciencias de la salud está constituida por la Oncología Infantil, debido a la importante repercusión afectiva que estas enfermedades desencadenan en los pacientes, sus familias y el propio personal profesional.

Aquellos enfermeros que brindan sus servicios en estas áreas, además de una sólida capacitación académica, requieren por cierto de cualidades que exceden el ámbito científico. En muchas ocasiones, son también importantes sus funcionaes en la contención emocional de los niños y sus padres, así como en aspectos de prevención y promoción de la salud para toda la familia del paciente.

Los graduados que desean especializarse en Oncología Infantil requieren habitualmente de un paso previo, que consiste en la formación en Pediatría general, aunque se recomienda también la adquisición de conocimientos en Emergencias o Cuidados Intensivos. A continuación, el profesional se convierte en especialista en esta disciplina después de 2 a 3 semestres de capacitación, dependiendo de cada sociedad científica o universidad.

Desde una posición no siempre reconocida y valorada, el enfermero especializado en Oncologia Infantil es fundamental tanto en el éxito de la lucha contra la enfermedad como en la mejoría de la calidad de vida del paciente terminal.